El conflicto de Palestina es uno de los más antiguos y complejos del mundo, que enfrenta a dos pueblos que reclaman el mismo territorio: los palestinos, que son mayoritariamente árabes y musulmanes, y los israelíes, que son mayoritariamente judíos. A lo largo de los años, el conflicto ha causado miles de muertos, heridos y desplazados, y ha generado una grave crisis humanitaria, especialmente en la Franja de Gaza, donde viven casi dos millones de palestinos bajo un bloqueo israelí que limita su acceso a bienes básicos como el agua, la electricidad, la salud y la educación.
Para entender el origen y la evolución del conflicto, es necesario remontarse a principios del siglo XX, cuando Palestina era parte del Imperio Otomano, que se desintegró tras la Primera Guerra Mundial. A continuación, presentamos una cronología de los principales acontecimientos que han marcado la historia del conflicto:
1917: La Declaración Balfour
El Reino Unido, que ocupó Palestina tras la Primera Guerra Mundial, apoyó la creación de un “hogar nacional para el pueblo judío” en Palestina, según el movimiento sionista, que buscaba un estado judío en su patria histórica y religiosa. Los palestinos rechazaron la declaración, que amenazaba su presencia y su identidad.
gaza1936-1939: La Gran Revuelta Árabe
Los palestinos se rebelaron contra el mandato británico y contra el proyecto sionista, ante el incremento de la inmigración judía en el territorio, impulsada por el nazismo y el antisemitismo en Europa. Los británicos respondieron con una dura represión, que causó miles de muertos y exiliados entre los palestinos.
1947-1949: La partición de Palestina y la primera guerra árabe-israelí
La ONU propuso la partición de Palestina en dos estados, uno judío y otro árabe, con Jerusalén bajo un régimen internacional. El estado judío tendría el 55% del territorio, aunque solo el 33% de la población. Los judíos aceptaron el plan, pero los palestinos y los países árabes lo rechazaron. Los judíos proclamaron el estado de Israel, que fue reconocido por varios países. Los árabes reaccionaron con una guerra, que terminó con la victoria de Israel, que amplió su territorio al 78% de Palestina, y con la expulsión o el éxodo de unos 750.000 palestinos, que se convirtieron en refugiados. Este hecho se conoce como la Nakba, que significa “catástrofe” en árabe.
1956: La guerra del Sinaí
Israel se alió con Francia y el Reino Unido para atacar a Egipto, que había nacionalizado el canal de Suez, una vía estratégica para el comercio y el petróleo. Israel invadió la península del Sinaí y llegó hasta el canal, mientras que Francia y el Reino Unido bombardearon el puerto de Port Said. La guerra duró solo unos días, pero causó unos 3.000 muertos, la mayoría egipcios. La intervención de Estados Unidos y la Unión Soviética obligó a los agresores a retirarse, y se estableció una fuerza de paz de la ONU en el Sinaí.
1967: La guerra de los Seis Días
Israel lanzó un ataque preventivo contra Egipto, Siria y Jordania, que habían movilizado sus tropas en las fronteras, y que contaban con el apoyo de otros países árabes. La guerra duró solo seis días, pero tuvo consecuencias decisivas para el conflicto. Israel ocupó el Sinaí, Gaza, Cisjordania, Jerusalén Este y los Altos del Golán, y triplicó su territorio. Además, unos 300.000 palestinos se sumaron a los refugiados de 1948, y unos 1,3 millones quedaron bajo el control israelí. La guerra también supuso el fracaso del nacionalismo árabe, que había prometido la liberación de Palestina, y el surgimiento de nuevos movimientos de resistencia palestina, como Al Fatah y la OLP, que adoptaron la lucha armada como estrategia.
1978-1982: La intervención israelí en Líbano
Israel invadió el Líbano, un país que sufría una guerra civil desde 1975, y que albergaba a miles de refugiados y combatientes palestinos. El objetivo de Israel era destruir la infraestructura y el liderazgo de la
OLP, que había trasladado su sede a Beirut tras ser expulsada de Jordania en 1970. La intervención israelí causó unos 20.000 muertos, la mayoría civiles libaneses y palestinos, y provocó la masacre de Sabra y Chatila, dos campos de refugiados donde las milicias cristianas libanesas, aliadas de Israel, asesinaron a unos 3.000 palestinos, con la complicidad o la indiferencia de las tropas israelíes. La intervención israelí también favoreció el surgimiento de grupos radicales islámicos, como Hezbolá, que se opusieron a la ocupación con ataques suicidas y secuestros. Israel se retiró del Líbano en 2000.
1987-1993: La primera Intifada
El pueblo palestino se levantó en un movimiento popular de resistencia civil y armada, que se conoce como la primera Intifada, ante los continuos fracasos diplomáticos y la dura ocupación israelí de sus territorios. La Intifada se caracterizó por el uso de medios precarios, como piedras, cócteles molotov y huelgas, frente al poderío militar de Israel, que respondió con represión, toques de queda, detenciones y asesinatos selectivos. La Intifada causó unos 2.000 muertos y 50.000 heridos entre los palestinos, y unos 200 muertos y 7.000 heridos entre los israelíes. Durante la Intifada, se fundó el movimiento islamista Hamas en Gaza, que se opuso al liderazgo de la OLP y que recurrió a los atentados suicidas contra objetivos civiles israelíes.
1993-2000: Los acuerdos de Oslo y el proceso de paz
Se firmaron los acuerdos de Oslo entre el líder palestino Yasser Arafat, de la OLP, y el primer ministro israelí Isaac Rabin, con la mediación del presidente estadounidense Bill Clinton. Los acuerdos establecían el reconocimiento mutuo entre Israel y la OLP, la creación de la ANP, que tendría un control limitado y transitorio sobre algunas zonas de Gaza y Cisjordania, y el inicio de un proceso de paz que debía culminar con la solución definitiva del conflicto en cinco años. Los acuerdos fueron recibidos con esperanza por muchos. En 1995, Rabin fue asesinado por un extremista judío, y en 1996, Hamas intensificó su campaña de atentados.
2000-2005: La segunda Intifada y el muro de separación
El fracaso del proceso de paz llevó a una nueva ola de violencia entre palestinos e israelíes, que se enfrentaron con atentados suicidas, asesinatos selectivos, incursiones militares y bombardeos. La segunda Intifada causó miles de muertos y heridos en ambos bandos. Israel construyó un muro que aisló y fragmentó el territorio palestino, y que fue condenado por la comunidad internacional.
2005-2014: La retirada de Gaza y las guerras de Gaza
Israel se retiró unilateralmente de Gaza, evacuando a los colonos y soldados que ocupaban el territorio desde 1967. Sin embargo, Israel mantuvo el control del espacio aéreo, las aguas territoriales y los pasos fronterizos de Gaza, sometiendo a la población a un bloqueo que restringe el movimiento de personas y mercancías, y que ha generado una grave crisis humanitaria.
En 2006, Hamas ganó las elecciones legislativas palestinas, derrotando al partido de Arafat, Al Fatah, que gobernaba la ANP. Esto provocó una división política y territorial entre los palestinos, que se enfrentaron
en una guerra civil que terminó con el control de Hamas sobre Gaza y de Al Fatah sobre Cisjordania.
Hamas se negó a reconocer a Israel e Israel respondió con varias operaciones militares contra Gaza, que causaron miles de muertos y heridos, la mayoría civiles palestinos, y enormes daños materiales. Las principales ofensivas israelíes fueron: Plomo Fundido (2008-2009), Pilar Defensivo (2012) y Margen Protector (2014).
2014-2023: El estancamiento del conflicto y la escalada de violencia
El conflicto de Palestina se ha estancado desde 2014, sin avances enl proceso de paz, y con más violencia y tensión. Entre los factores que han influido en esta situación están:
1.- Los asentamientos israelíes en Cisjordania y Jerusalén Este, que violan el derecho internacional y las resoluciones de la ONU;
2.- El fracaso de las negociaciones de 2014, que no acercaron las posiciones de las partes; el reconocimiento de Palestina como estado observador de la ONU y miembro de la Corte Penal Internacional, que le permite denunciar a Israel por crímenes de guerra;
3.- La falta de apoyo y de presión de la comunidad internacional, que ha sido cómplice de la ocupación y la colonización israelí.
En octubre de 2023, Hamas atacó a Israel con cohetes, Hecho que desde EN COMU PODEM NO aprobamos ni justificamos, y que mataron a varios civiles israelíes.
Israel respondió con una ofensiva genocida, que ha exterminado a miles de palestinos, la mayoría mujeres, niños y ancianos, y ha destruido infraestructuras vitales, como hospitales, escuelas y plantas de tratamiento de agua.
Israel ha bombardeado objetivos civiles, con la excusa de acabar con Hamas, y ha ignorado los llamamientos al alto el fuego. Mientras tanto, los gobiernos de Occidente, con la implicación histórica en favor de Israel, han mirado a otro lado, o han justificado la agresión israelí como defensa propia.
Es por todo ello que desde EN COMÚ PODEM Sant Andreu de la Barca, damos nuestro apoyo al pueblo palestino, pedimos el alto el fuego inmediato, que se restituyan los agravios sufridos y también se restablezcan sus derechos territoriales y autonomía.